Limpiamos y secamos las pieles de las frutas que vamos a utilizar.
Cortamos una tira alargada de piel de piña, trozos pequeños de piel de yuca y la parte superior de un limón.
Dejamos secar las pieles durante veinticuatro horas.
Una vez secas, las cubrimos con látex.
pegamos el trozo de limón sobre una anilla plateada del tamaño de nuestro dedo. ¡Ya tenemos el anillo!
Con hilo de pescar cosemos un botón en cada lado de la tira de piña y los unimos mediante una goma de pelo. Esto será la pulsera.
Finalmente, con cordel fino y una aguja, atravesamos de uno en uno los pequeños trozos de yuca y atamos los extremos a un cierre de collar. |